La IA, el alza salarial y la vuelta de los Irene, protagonistas en 2023
La inteligencia artificial (IA) y su brutal irrupción en 2023 saltó como un demonio a las páginas de este blog en un año que ahora acaba, y que vino además marcado por el alza salarial en Madrid, que se repetirá también en 2024 por encima del 5% –previsiblemente–, el bloqueo en Barcelona, la vuelta de los oyentes a las salas y una nueva edición de los Premios Irene.
Ningún fenómeno ha acaparado tanta atención como la violenta entrada en escena de la inteligencia artificial, incluyendo su aplicación en el uso profesional de la voz. Como un torrente, el desarrollo tecnológico de la IA, capaz de clonar voces, y el menudeo de unas cláusulas que tratan de obligar a los actores a ceder sus voces más allá de lo que estos consideran razonable, despertaron en todo el mundo el recelo de la profesión, que fue capaz de unirse y tratar de domeñar el terremoto tecnológico, y el descontrol en su aplicación, según recogieron las páginas de nuestro blog a lo largo de 2023.
Los actores reclaman control de la tecnología, compensación a los actores, y voluntariedad. Y así lo demandaron en un podcast, que celebró los cinco años de historia de nuestro blog, en boca de dos destacadas representantes de La General de Locutores. Una defensa a ultranza de la creatividad humana, que también entonó el actor Pachi Aldeguer, en un artículo dedicado al asunto; así como diferentes piezas destinadas, o bien a repasar los avances tecnológicos en el campo del doblaje; o bien a glosar la promesa de crear un almacén de voces que ayude a proteger los derechos de autor, formulada por el anterior ministro de Cultura; sin olvidar los temores de otros colectivos, como el de los traductores audiovisuales, muy afectados ya por el advenimiento de la inteligencia artificial al mundo audiovisual.
La preocupación es tal que, hasta el relevo al frente del sindicato madrileño Adoma, se vio teñido por el esfuerzo por redimir el uso incontrolado de la IA. En mayo la llegada de la nueva ejecutiva a la organización sindical, con un nuevo presidente, Raúl Lara, se conjuró para defender los derechos de los actores frente a los abusos de la tecnología. Y así se lo hicieron saber a los aspirantes a actores, en la primera reunión del sindicato con las escuelas de doblaje de Madrid.
Un primer contacto donde los madrileños presumieron de su convenio colectivo, que les asegura mantener su poder adquisitivo hasta 2025, con una ganancia extra del 2% este 2024 — que se elevará al 3%, en 2025 — derivada de la compensación por vacaciones, finiquito y pagas extras, arrancada a la patronal en la negociación en 2021.
Así, pues, los actores de doblaje de Madrid se disponen a arrancar este 2024 con una subida salarial superior al 5%, resultado de sumar el IPC, que, a falta de conocer el dato de diciembre, acabó noviembre en el 3,2%, más la citada compensación del 2%, en el trabajo por convocatorias.
Además, la nueva dirección debe también afrontar otras tareas, despejada la negociación colectiva hasta 2025, como es, precisamente, la cesión de derechos, que hoy las distribuidoras — salvo Disney — eluden compensar, y que, junto al teletrabajo y la colaboración de los actores jubilados, centrarán la mesa de negociación colectiva los próximos meses en Madrid.
Una situación idílica a juzgar por el panorama laboral en el resto de España, con Barcelona trabada, sin lograr arrancar la negociación de su convenio colectivo, después de limitar, en 2023, su alza salarial al 1,25% —frente al madrileño 6,7%; resultado de sumar el IPC del 5,7% y una compensación entonces del 1% —; y el resto de plazas aún peor — Valencia, Galicia, País Vasco, Andalucía… —, con los precios del doblaje por los suelos, sin convenio, y con pocas señales de negociación.
Además, Madrid, ya en 2025, seguirá asegurando su poder adquisitivo, y aun ganándolo, con un 3% adicional, fruto de la citada compensación por vacaciones, finiquitos y paga extra, que da por concluido el aterrizaje de la medida pactada en 2021.
Los estudios se abren a ‘hacer sala’
Otro hito, como es la vuelta de los oyentes a las salas de doblaje, ha marcado 2023. Sendos programas, en Madrid y Barcelona, impulsados por el sindicato DUB en la capital catalana, en Madrid por las escuelas de doblaje y Netflix, permiten a los aspirantes a actor de doblaje acomodarse en la oscuridad de las salas, y no perder comba de la actuación de sus compañeros más experimentados.
Una vieja costumbre, la de ‘hacer sala’, interrumpida por la pandemia y a veces por la confidencialidad, que, en Madrid, se plasmó en un acuerdo entre las escuelas de doblaje y la plataforma de contenidos Netflix, y de cuyos resultados el director de la Escuela de Doblaje de Madrid (EDM) — editora de este blog —, Lorenzo Beteta, se ha mostrado “moderadamente satisfecho”
Bautizado como Fresh Voices, el acuerdo con Netflix ha permitido en el caso de la Escuela de Doblaje de Madrid enviar a dos docenas de alumnos como oyentes a lo largo de 2023, y en ocasiones ser incluso convocados por los directores de las producciones de la multinacional, dobladas en los principales estudios de la región — VSI-Sonygraf, Deluxe 103, EVA Tecnison, Iyuno-SDI Group o Best Digital —.
Además, junto al acuerdo con Netflix, la escuela ha lanzado su primera convocatoria de becas. Y completado su catálogo con novedosas formaciones, entre las que destaca un curso de gestión de las emociones en el uso de la voz, así como la incorporación de destacados profesionales del mundo del doblaje, como Eduardo Gutiérrez ‘Guti’.
Finalmente, como broche de oro, el año que ahora acaba significó también la vuelta de los Premios Irene de Doblaje, tras la pausa obligada por la pandemia, en una edición, retransmitida por televisión por primera vez, a través de la red social Twitch, que premió la aportación al doblaje de reputadísimos profesionales, como Miguel Ángel Jenner — entrevistado también en las páginas de este blog—, José Luis Gil, Javier Dotú, Pilar Santigosa, Lucía Esteban, María Antonia Rodríguez, Carlos del Pino, Ana Ángeles García, Juan Fernández, Paloma Escola; que recibieron sus galardones en una emotiva gala, junto a otras figuras, como el periodista Salvador Jiménez, la traductora María José Aguirre de Cárcer, el productor Mariano García y el técnico de sonido José Ángel Fernández.
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