EDM ahonda en la gestión de las emociones en el uso de la voz

EDM ahonda en la gestión de las emociones en el uso de la voz

La gestión de las emociones es un asunto que comienza a suscitar el interés de muy diversas disciplinas. Desde hace años, una miríada de técnicas, cursos y formaciones llaman la atención de variadas personas, interesadas en profundizar en el conocimiento personal. Los actores no son una excepción. Y ahora, en el mundo del doblaje y de la voz, también es posible ahondar en este saber, que promete la excelencia a quienes se atrevan a iniciar este viaje a través del propio yo.

En el caso de los actores, los profesionales se hallan sometidos a una doble presión. Por un lado, deben hacerse expertos en emociones, para comprender a su personaje, y atinar en la elección de su bagaje emocional. Por otro lado, como simples trabajadores, están sometidos a un entorno, a menudo estresante, donde los nervios pueden jugar una mala pasada, e impedir que aflore lo más granado de cada intérprete.

Desde esta doble perspectiva, la Escuela de Doblaje de Madrid (EDM) ha organizado un curso de gestión de las emociones y autoconocimiento personal — Tú y tu voz, más allá del atril que, a partir del 31 de octubre, explorará el universo de la propia personalidad, y ayudará a los alumnos —actores de doblaje, pero también a toda persona interesada— a bucear en sus recursos más personales, y abrir un camino hacia la excelencia en la interpretación sostenida por la voz.

“Ojalá me hubieran hablado a mí de esto cuando empecé en el doblaje”, explica Silvia Sarmentera, actriz y directora de doblaje, y una de las dos profesoras que impartirán el curso los martes por la tarde en la sede de la escuela en Madrid.

Titulada en coaching y Máster en disciplinas como autenticidad, autoconocimiento e inteligencia cognitiva, la actriz, con más de 20 años de experiencia en el atril, se acercó al mundo del desarrollo personal hace doce años. Y desde entonces no ha dejado de investigar en un campo, fascinante y cargado de posibilidades para los actores de voz.

“Si me hubieran hablado de esto, no me hubiera llevado tantos disgustos como me he llevado en mi carrera en el doblaje; lo hubiera gestionado de otra manera”, afirma.

El curso reunirá a un máximo de 10 alumnos que, de la mano de Sarmentera y de Melania Marcos, también ‘coach’ y actriz, profesora de locución en la escuela y destacada profesional en este ámbito, iniciarán un viaje por el mundo de las emociones, a fin de descubrir el talento oculto de cada persona y escarbar en ese mundo, absolutamente genuino y personal.

“El habla, la voz, desnuda quienes somos. Y si uno quiere dar lo mejor de sí mismo tiene que trabajar también su autoconocimiento”, subraya Marcos, ‘coach’ emocional y creadora del método ‘La Voz Medicina’.

“Es un ámbito muy potente y muy poco estudiado, al que yo me ido acercando a lo largo de los años”, añade la también profesora de locución publicitaria en EDM.

“Hay personas que tienen una capacidad funcional, articulan muy bien, tienen voces poderosas, tienen oído, saben utilizar su cuerpo como instrumento, pero hablan y se comunican desconectados de su mundo emocional. Y así nunca llegarán a un grado de excelencia desde el punto de vista interpretativo, ni a la hora de comunicar y de llegar al interlocutor”, concluye.

“Es importante lo que nos decimos y cómo nos lo decimos. Y hacer un trabajo a varios niveles: psicológico, emocional, mental… Un trabajo holístico con la voz para que tú tengas cambios en tu personalidad, en tu psique, que favorezcan tu trabajo como actor”, completa.

Actores inimitables

“Tengo alumnos que imitan a compañeros míos. Pero tienen que comprender que, como directora, si oigo a alguien que imita, por ejemplo, a David Robles, no les llamaré a ellos; llamaré a David Robles, que es el original y tiene más experiencia, y será capaz de ofrecer un trabajo mejor”, tercia Silvia Sarmentera, destacada directora de doblaje en la capital.

“Cada actor tiene que tener su propia personalidad en la voz. Eso es lo que vende realmente”, añade.

Por espacio de tres horas, los alumnos explorarán el territorio de la expresión, la comunicación, los sentimientos, las emociones, la inseguridad… Un viaje a la medida de cada uno de los participantes. Y que hará un alto en el camino en alguno de los sentimientos más peligrosos de la profesión.

“Vamos a hablar de la envidia, por ejemplo”, destaca Sarmentera. “En esta profesión está a la orden del día”, avisa. “Cuando envidias a alguien, envidias un potencial de esa personal. Pero tú también tienes tu potencial, lo que ocurre es que debes trabajar en él. Lo inteligente es aprender de los demás. Eso lo tienes que trabajar”, concluye.

El programa promete descubrir matices nuevos en la voz. Y algo más radical. Cambiar la manera de manejar las emociones y enfrentarse al atril.

Para ello, la decena de viajeros escogidos iniciarán un viaje a través de su propio territorio emocional. Y se desharán de un pesado fardo: los miedos, la inseguridad y las falsas creencias. Para reaparecer, al término del trimestre, con una voz más libre y liviana, que resuene libre y auténtica, y dominadora de todo su potencial, según promete el curso.

“Nunca deberíamos dejar de aprender. Es un proceso constante. Un viaje sin fin, con el objetivo de crecer juntos”, remata Marcos.

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